La combustión y su buen funcionamiento se ve reflejada en la tonalidad que puede tener. Por esto, es recomendable siempre estar atento a este detalle.

¿Te has preocupado de hacerle mantención a tu cocina o calefón? Un indicador de que las cosas no están funcionando correctamente es el color de la llama del fuego, lo cual podría ayudarte a identificar una combustión incorrecta y es necesario que sea revisado por un experto.

A continuación te contaremos qué color de llama es el que debe tener y la más probable explicación a otros posibles colores: como amarilla o naranja. 

El color de la llama siempre debe ser azul

Cuando la combustión de tu horno, calefón u otro artefacto funciona de manera correcta, el color de la llama siempre será azul, si existe una mezcla de combustible con la cantidad precisa de aire. Para esto, es muy importante que realices la mantención en los tiempos que corresponde, y así no sufrir un problema que puede ser más peligroso de lo que piensas.

¿Qué color de la llama debería preocuparme?

Existen dos opciones que son las más comunes, y que son reflejo de cierto desperfecto de tu horno, calefón u otro: amarilla o naranja. En ambos casos es necesario revisar el aparato y su sistema de ventilación, pero ¿cuál es la diferencia entre ambos?

Amarilla o naranja: hay una falla en la mezcla con aire (oxígeno), esto genera una combustión deficiente, genera monóxido de carbono y necesita una revisión rápida, ya que puede ser necesario hacer una limpieza y que explica el poco ingreso de oxígeno.

Ahora bien, exigen otras opciones como verde o rojo. Lo detallamos a continuación:

Verde: en este caso, lo que pasa es que se están quemando partículas como metal, zinc o cobre, entre otros. Esto genera una combustión fallida. En este caso, es importante realizar una revisión completa y limpieza por parte de un experto.

Roja: puede ser la más peligrosa, en este caso es necesaria una revisión profunda del artefacto, su instalación, etc. Este color demuestra que hay partículas de óxido quemándose.

En conclusión, la llama de tus aparatos a gas, como puede ser el calefont o el horno, deben siempre ser de color azul, además de estable y silenciosa. Estos dos últimos puntos también son importantes, ya que cuando existe inestabilidad y ruido hay problemas con el regulador de gas. Ahora, si la llama comienza a tornarse de algún otro color como amarillo, naranja, rojo o verde, debes llamar a un especialista que revise sus sistemas de ventilación e incluso su instalación. No lo olvides, siempre pon mucha atención al color de la llama y así evitarás más que un mal rato.