Como sabrás el cambio climático es un problema real que necesita la ayuda de todas las personas para poder combatirlo. Preguntarte cómo reducir tu huella de carbono es un buen comienzo para volverse parte de la solución.

 

¿Qué es la huella de carbono?

Una huella de carbono es una forma de medir las emisiones de gases de efecto invernadero que se producen debido a tu estilo de vida y las actividades que sueles hacer, ya sea de forma directa o indirecta. Por ejemplo, cómo te transporta, tu dieta, tus hábitos de consumo o el uso de electricidad, entre otras. 

A continuación te contamos acciones cotidianas que te ayudarán a disminuir tu huella. 

4 formas de reducir tu huella de carbono

Prefiere la moda sustentable

¿Has escuchado hablar del fast fashion? Es la forma de producir ropa en grandes cantidades, con materiales económicos y que duran poco tiempo, en función de las tendencias del momento. Según la ONU, esta industria es responsable de cerca de un 10%  de las emisiones mundiales de efecto invernadero.

Además, la mayoría de esta ropa, al pasar de moda, suele terminar en vertederos donde producen metano a medida que se descomponen.

Así, una forma de cómo reducir tu huella de carbono es comprando de manera consciente, solo realmente aquellas prendas que sabes que podrás usar por muchos años, y que realmente te gusten. También, puedes optar por aquellas fabricadas con materiales reciclados, o las que ofrecen en tiendas de segunda mano. 

Ten tu propia botella

Tener tu propia botella, ya sea de aluminio, o vidrio, significa reducir el plástico de un solo uso, ya que comprar botellas plásticas de agua cada vez que tienes sed o sales a comer es poco amigable con el medioambiente. De esta forma, estarás reduciendo tu huella debido a que estarás evitando tanto los gases la fabricación de cada botella, como su transporte.

A largo plazo, también estarás haciendo un ahorro para tu bolsillo.

Come más vegetales (y menos carne)

La ganadería es una de las industrias más contaminantes del mundo, representando un 18% de los gases invernaderos del mundo. Por ello, comer frutas, verduras, semillas y legumbres gasta mucha menos energía del planeta.

 Opta por aquellos vegetales que vengan sin empaques plásticos. 

Maneja menos

La bicicleta y caminar siempre serán mejores opciones que el auto, tanto en tu bienestar personal como en el del medio ambiente. De hecho, un automóvil promedio produce cerca de cinco toneladas de CO2 cada año (aunque es una cifra variable según modelo, tipo de combustible y eficiencia). Por eso, cuando tengas la oportunidad, procura utilizar otras opciones de transporte. 

El transporte público, o los autos compartidos también son una muy buena opción puesto que las grandes cantidades de dióxido de carbono emitido por cada viaje son distribuidas entre todas las personas que lo usan.

¡Aporta tu grano de arena!

Ahora que sabes cómo reducir tu huella de carbono puedes comenzar a implementar estas medidas poco a poco. Por ejemplo, no es necesario que te vuelvas vegano de un día para otro, o que cambies tu sistema de transporte al cien por cien, recuerda que cada aporte suma. Si quieres seguir ayudando al planeta, cuidando el agua, te recomendamos este artículo sobre los beneficios de las duchas cortas.