Los artefactos a gas tienen muchísimas ventajas en comparación a los eléctricos, por ejemplo, en el caso de las cocinas eléctricas estas toman algún tiempo en alcanzar la temperatura requerida, mientras que en las de gas esto ocurre de manera instantánea. Sin embargo, si los usas de manera incorrecta podrías ponerte en riesgo. Por eso, hoy te contamos algunas medidas de seguridad para evitar accidentes con el gas licuado en tu hogar. 

4 recomendaciones de seguridad para tener en cuenta

Ten una revisión anual de seguridad 

Un error frecuente es esperar a que los artefactos a gas fallen para llamar a un especialista, pero si uno revisa los manuales de cada aparato estos suelen recomendar una revisión al año. 

Al momento de llamar a un técnico especializado (asegúrate que tenga sus licencias), puedes pedirle que revise todos los aparatos a gas que tengas en casa y también las tuberías, regulador y válvulas para comprobar que no exista ninguna fuga. Esto se efectúa con una simple prueba de hermeticidad.

Mantén aseada la zona de almacenaje

Es importante mantener libre de polvo las zonas donde guardas tus artefactos de gas. ¿Por qué? Pues la suciedad del ambiente puede causar mal funcionamiento del artefacto, especialmente en su quemador, el cual debe estar siempre limpio para tener una buena combustión. 

Asegúrate de ventilar

Como sabrás, los aparatos a gas pueden producir  una dosis de monóxido de carbono cuando no existe el suministro de aire necesario en funcionamiento. Por eso, dependiendo de la potencia del artefacto y el volumen de la habitación, debe existir una abertura normalizada llamada celosía. En general esta área de ingreso de aire debe tener una superficie de 5 cm2 por cada kW de potencia del artefacto.  

Familiarízate con los síntomas de intoxicación

Una fuga de gas desplaza la cantidad de oxígeno que hay en el aire, pero puedes percibirla rápidamente como resultado del odorante que se le incorpora al gas.

Importante recordar que el color de la llama en la combustión debe ser azul y estable, una llama anaranjada indica una combustión incompleta la cual produce emisiones contaminantes como por ejemplo el monóxido de carbono, el cual produce intoxicación por lo que tu cuerpo puede experimentar dolores de cabeza, mareos, náuseas o dificultad para respirar. Si recuerdas estos síntomas, podrás reaccionar más fácilmente en caso de cualquier emergencia.

Prevenir para evitar accidentes

Como pudiste ver los accidentes con artefactos a gas son muy fáciles de prevenir, sólo requieren de  ciertas medidas de seguridad que pueden disminuir fácilmente los riesgos. Ahora, si quieres saber más sobre seguridad o identificar una fuga de gas, te recomendamos leer nuestro blog Más Energía en su sección soluciones.